LECTURA DIRIGIDA CON CABEZAS ENUMERADAS
- ¿Cómo reconocían al padre de Luis en México? ¿En Los Ángeles? Explica.
(37-38) - ¿Cómo sus vidas cambiaron de momento? ¿Por qué fue tan corto ese tiempo? (38-39)
- ¿Qué causaba que la familia se desarraigaba tantas veces? (39-10)
- ¿Por qué Luis se sentía como pelota rebotando? (40-41)
Diario Literario #3
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Sinónimos
- jefes
- desprecio
- le ardían
- entusiasmo
- presencia
- diferente
- rindió
- masacre
- se funda
- con miedo
- conclusión
- encogerme
- prescindible
- enroscarme
- “La vida loca” de mi juventud, aunque devastadora, fue sólo el comienzo de lo que veo que ahora es un crecido y consistente nivel de destrucción (1) genocida que (2) se basa en el (3) silogismo de que hay una juventud marginada sin trabajo ni futuro que, por lo tanto, es (4) desechable. (p.13)
- Recuerdo el pelo ondulado de mi padre y su cara bien rasurada, su (5) porte correcto, terco y erguido que contrastaba con el de mi madre gordita, el pelo lacio y tupido, los rasgos indígenas, que a veces reía con muchas (6) ganas, los ojos estirados como dos ranuras y que otras veces como desde una tumba. (p.21)
- Aunque director de la escuela secundaria del lugar, mi padre no (7) se agachó ante los (8) caudillos locales afiliados al partido que gobernaba México. (p. 21)
- A mí me moldeó esta pareja (9) dicotómica como luna y sol, curandera y biólogo, soñadora y realista, mujeres/fuego y hombre/agua. (p.23)
- Mi mamó recogió silenciosamente nuestras cosas y se fue pero yo sabía que la frustración y el coraje (10) le hervían por dentro por no poder hablar y porque cuando hablaba nadie le hacía caso. (p.26)
- El Rano se regocijaba viéndome (11) retorcerme de dolor, llorar o (12) acurrucarme (13) temerosamente de su exaltado sentido de poder. (p.27)
- La única emoción que mi hermano me había mostrado hasta entonces era el (14) desdén.
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